The Bluebird Cafe - Caratula
The Bluebird Cafe

The Bluebird Cafe, Nashville, Tennessee.

Del Bluebird a la fama

A veces desde las cosas pequeñas se llega a las más grandes. ¿Conoces qué es el Bluebird Café? Pues si no es así, te cuento. The Bluebird Cafe es el lugar desde el cual han saltado a la fama muchos de los cantantes de los temas que bailas. Es un pequeño café-bar a las afueras del downtown de Nashville, en el 4104 de Hillsboro Pike, que parece estar fuera del alcance de la vorágine de la industria musical de la ciudad de la música.

Sin embargo, no sabes cuán importante es para este mercado. Desde que abriera sus puertas a primeros de los años 80, el Bluebird ofrece sesiones musicales que dan la posibilidad de darse a conocer a jóvenes promesas escritores/compositores de música country.

Estos llegan hasta allí desde todos los puntos del país para actuar, entre otros, ante representantes de las grandes firmas discográficas. Con solo la ilusión por mochila y con sus propias creaciones musicales, buscan hacerse un hueco en esas sesiones para hacer sus sueños realidad: escribir para los grandes o ser uno de ellos.

Si te digo que artistas de la talla de Kathie Mattea, LeAnn Rimes, Pam Tillis o Gretchen Peters (la autora de muchas canciones premiadas de grandes artistas), te pongo solo algunos ejemplos de cantantes/autores que han pasado por ahí. El mismo Garth Brooks saltó directamente desde el Bluebird a Capitol Records después de ser fichado en una de sus actuaciones en el pequeño escenario del café.

Estas son las cosas que pasan en el Bluebird Cafe. Un compositor de música country, Jonathan Singleton, está en el escenario. Cuenta que tiene un tema suyo, que canta el conocidísimo grupo Rascal Flats, en la radio. Y, ale hop, Rascal Flats aparecen en el escenario. (Fragmento).

El Bluebird Cafe en el cine y la televisión

Para que compruebes lo que significa este lugar, puedes ver la película TheThing called love (1993) que, aunque muy sencilla y de tintes juveniles, muestra muy bien lo que significa el café para los artistas del country. Fue una de las primeras películas de Sandra Bullock y la última del desaparecido River Phoenix (hermano del famoso actor Joaquin Phoenix).

Trailer de la película The Thing Called Love.

Sin duda, una de las escenas más representativas es cuando Samantha Mathis, protagonista del film en el que pugna por la fama desde el Bluebird, canta Maybe God’s a Woman Too. Por fin, K T Oslin, que interpreta a la propietaria del local, decide darle la oportunidad de ir a la sesión de “cazadores de talentos”.

The Bluebird Cafe
The Bluebird Cafe

Samantha Mathis cantando Maybe God’s a Woman Too en el Bluebird Cafe.

El Bluebird cambia de propietario

En el año 2008, la dueña y fundadora del Bluebird Café, Amy Kurland, vendió el establecimiento a la Asociación Internacional de Cantautores de Nashville (NSAI). La NSAI es una organización sin ánimo de lucro encargada de dar apoyo a este colectivo. El objetivo era ser una cesión que continuase en el futuro con la misión de descubrir a los nuevos cantautores de la música country, así como fomentar la relación con ellos.

Cuatro años más tarde, en 2012, el Bluebird adquirió impulso fuera del panorama vaquero a través de la serie de la ABC, “Nashville”. Allí, se cuentan perfectamente los esfuerzos de las promesas del country para conseguir llegar a la industria y los entramados que ésta encierra. El Bluebird Café fue el escenario en el que los protagonistas actuaron en muchos capítulos de la serie.

Aunque la mayoría de las veces son compositores y cantautores los que pueblan el escenario del Bluebird Cafe, cuando menos te lo esperas aparece la súper estrella. En marzo de 2014 Keith Urban interpretó su propio tema Sometimes Angels Can Fly.

Como ves, el Bluebird tiene mucha historia que contar a quienes nos entusiasma la música country y su mundo. Si quieres saber más cosas sobre el Bluebird Cafe, te recomiendo una visita a su página web oficial.

Paloma Torres

Country music fan. Lo de bailar line dance vino mucho después...